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6 trucos profesionales de fotografía gastronómica


¿Te gustan las imágenes bonitas? A nosotros también. Y estamos casi seguros que también compartes con nosotros la debilidad por la buena comida y la gastronomía. Entonces, ¿por qué no unir ambas? Esta combinación es la base de la fotografía gastronómica.

Si bien puede haber parecido algo sencillo gracias al hashtag de Instagram #FoodPorn, la fotografía de alimentos es un arte que requiere buena luz, colores específicos y tonos concretos. Es por eso que en este artículo te dejamos los seis principios de la fotografía culinaria, para que tu comida se convierta en una obra de arte.


Dispara!


¿Cuántas veces te has sacado una selfie y decidiste borrarla porque no saliste como esperabas? Eso se debe generalmente a que el ángulo no era el correcto. Lo mismo sucede con la comida. Nunca sabes exactamente cuál será el ángulo que mejor refleje el plato, es por eso que te aconsejamos sacar tantas fotos como puedas, desde distintos puntos. Diagonal, por la derecha, por la izquierda, de abajo, de arriba y como se te ocurra.

Hay fotografías en primeros planos que logran que los ingredientes se vean de forma más detallada, y hay otros que prefieren tomar fotografías de sus delicias con una vista más aérea.


Captura la luz natural

Un flash demasiado potente puede arruinar una hermosa fotografía. Así como también una foto muy oscura puede perder su magia. Las comidas normalmente incluyen ingredientes como aceites, salsas, líquidos, así como también se encuentran en platos de vidrio o aluminio ¿Cuál es el problema de todo esto? Su reflejo. Si le das un buen uso a la luz natural, podrás iluminar de manera más armoniosa y natural tus fotografías gastronómicas. Así que acerca tu plato a la ventana y toma la foto cuando tengas una buena cantidad de luz entrando por ella.


Ningún detalle es demasiado pequeño


Lo que destaca una obra maestra de cualquier otra fotografía son esos pequeños detalles. Por ejemplo, cuando tomas una fotografía de un plato, intenta que los colores en él mantengan un estilo y un tono, que la forma en que las especias estén puestas dirijan la mirada hacia el corazón de la comida.

También es importante recordar que se puede hacer zoom-out de la comida y realmente apreciar qué es lo que sucede en la mesa. Un buen mantel, una vajilla preciosa y servilletas que combinen pueden hacer de una comida de todos los días en una imagen digna de estar en un museo.


Combina alimentos y bebidas


Hay pocas estrategias tan eficaces para tentar a alguien que juntar una buena bebida con una deliciosa comida. Por ejemplo, puedes ubicar una copa de vino detrás de un filete. También puedes juntar un café con una torta y será una pareja celestial. Nunca pierdas de vista que el centro de tu fotografía debe ser la comida, todo el resto debe estar alrededor y en un segundo plano.


No tengas miedo a jugar!


Las fotografías de comida no tienen por qué ser estáticas ni serias. A veces, jugar con los colores, las formas y las texturas pueden darte como resultado una imagen espectacular. Saca provecho de tu ambiente ¿tienes una cocina con mármol? ¿Unos cubiertos divertidos? ¿Los tonos de tu comida combinan? ¿El gas de la soda tomó una forma bonita?


Dale vida al plato


¿Quieres llamar la atención de tus usuarios? Entonces ofréceles fotografías con vida. No hay nada más aburrido que un plato estático, con colores aburridos y que no cause nada. Lleva a tus usuarios a tu cocina, muéstrales la salsa fresca, las pastas recién hervidas o el pollo aún humeante. Hasta algunas migajas al lado de la torta son aceptadas.


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